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UNCA
11/04/2014

El Dr.Argañaraz planteó el debate sobre el “desorden fiscal” en la Argentina

La polémica coparticipación de recursos entre Nación y provincias, las alternativas de financiamiento del déficit fiscal y los nuevos escenarios económicos que se presentan fueron abordados por el doctor en economía Nadín Argañaraz, en una conferencia a la que acudieron políticos, funcionaros, autoridades y profesionales de la UNCA.  


Las complicaciones que tienen muchas de las provincias del país por la excesiva suma de recursos que resignan anualmente al Gobierno Nacional, comenzaron a profundizarse en los últimos años. La situación trae aparejado además inconvenientes con los recursos coparticipables que las provincias destinan a los municipios. Nadin Argañaraz, un prestigioso economista que llegó a la provincia invitado por la UNCA, la Municipalidad de la Capital y el Consejo de Ciencias Económicas, centró su disertación en esta problemática. Así explicó que al ser un país federal, Argentina  sufre las consecuencias del mal manejo de los recursos coparticipables.

“Estamos con un desorden fiscal bastante importante, en una especie de ´sálvese quien pueda´ donde cada uno trata de subir impuestos, y en Argentina el contribuyente es uno solo”. 

De acuerdo a las investigaciones que realizó Argañaraz –quien preside el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF)-, se están cuantificando los fondos que las provincias están resignando por año a la Nación. Así por ejemplo informó que Catamarca perdió el año pasado la friolera cifra de $2.853 millones.

Desde su perspectiva, la crisis comenzó a gestarse en el 2001 con la creación del impuesto al cheque, y  luego con la creación de los derechos de exportación. Éstos son impuestos que no se coparticipan, y en el caso del impuesto al cheque se creó con una coparticipación muy baja para las provincias. “A partir de ahí los recursos van en mayor medida a Nación, y en menor medida a las provincias. Desde ese momento se agravó esta pérdida de recursos y hoy las provincias, que a fines de la década del noventa recibían un 35% de toda la recaudación, reciben un 25%”.

La solución a este desfasaje, según el economista, depende del consenso político, ya que a nivel técnico, manifestó que se avanzó de manera importante. “Hay que encontrar la manera de empezar a desenredar toda esta cuestión que hemos ido generando con los años y que cada vez se complica más”. Sin embargo, el trabajo de revertir esta situación no va a ser fácil, ya que de acuerdo a su perspectiva la esencia de la coparticipación es lo que en economía se le llama un “juego de suma cero”: “si uno gana es porque otro pierde no hay manera de que todos ganen, excepto que la Nación resigne recursos. Tiene que haber una negociación política para que los recursos se distribuyan de una manera mas equitativa”, opinó.